En el mundo digital actual, la seguridad cibernética se ha convertido en una preocupación fundamental para individuos y organizaciones. Con el aumento de los ciberataques y las amenazas persistentes, es crucial implementar mejores prácticas de seguridad para proteger nuestros activos y datos confidenciales. Según el informe de EUROPEAN UNION AGENCY FOR CYBERSECURITY (ENISA) Threat Landscape 2023, los principales ataques informáticos a la infraestructura en ese año fueron los siguientes:

  1. Ransomware
  2. Malware
  3. Ingeniería Social
  4. Amenazas contra los Datos
  5. Amenazas contra la Disponibilidad (Denegación de Servicio – DoS)
  6. Amenazas contra la Disponibilidad (Amenazas a Internet)
  7. Manipulación de la Información

Para fortalecer nuestra seguridad, es fundamental examinar en detalle algunas de las amenazas más comunes y familiarizarnos con las mejores prácticas recomendadas para protegernos de manera efectiva.

1. Ransomware

El ransomware es una amenaza devastadora para la seguridad de los activos digitales. Este tipo de ataque involucra la encriptación de datos por parte de ciberdelincuentes, seguido de una exigencia de rescate para su liberación. Para protegerse contra el ransomware, se recomienda seguir las siguientes mejores prácticas:

  • Mantener los sistemas operativos y aplicaciones actualizados con los últimos parches de seguridad.
  • Utilizar software antivirus y antimalware confiable y mantenerlo actualizado.
  • Realizar copias de seguridad regulares de los datos importantes y almacenarlas en un lugar seguro y fuera de línea.
  • Evitar hacer clic en enlaces o descargar adjuntos de fuentes desconocidas o sospechosas.
  • Educar a los usuarios sobre las técnicas de phishing y cómo identificar correos electrónicos o mensajes sospechosos.

2. Malware

El malware se refiere a cualquier software o firmware malicioso destinado a realizar un proceso no autorizado que afecta la confidencialidad, integridad o disponibilidad de un sistema. Para protegerse contra el malware, se recomienda seguir estas mejores prácticas:

  • Utilizar software antivirus y antimalware confiable y mantenerlo actualizado.
  • Mantener los sistemas operativos y aplicaciones actualizados con los últimos parches de seguridad.
  • Descargar software y aplicaciones solo de fuentes confiables y verificadas.
  • Evitar hacer clic en enlaces o descargar adjuntos de fuentes desconocidas o sospechosas.
  • Ejecutar exploraciones regulares de seguridad en busca de malware y eliminar cualquier amenaza detectada.
  • Utilizar firewalls y configuraciones de seguridad adecuadas para proteger las redes y los sistemas.

3. Ingeniería Social

La ingeniería social abarca una amplia gama de actividades en las que los atacantes intentan explotar errores o comportamientos humanos para obtener acceso a información o servicios. Para mitigar los ataques de ingeniería social, es importante seguir estas mejores prácticas:

  • Educar a los usuarios sobre las tácticas comunes utilizadas por los estafadores.
  • Promover una cultura de seguridad cibernética en la organización.

4. Amenazas contra los Datos

Las amenazas contra los datos incluyen brechas y filtraciones de datos. Las brechas de datos y las filtraciones representan riesgos significativos para la seguridad de la información. Las brechas de datos son ataques deliberados perpetrados por ciberdelincuentes con el objetivo de acceder y divulgar datos confidenciales o protegidos. Por otro lado, las filtraciones de datos son situaciones en las que se produce la pérdida o exposición involuntaria de datos sensibles debido a errores de configuración, ulnerabilidades o fallos humanos. Para proteger los datos, es esencial seguir estas mejores prácticas:

  • Implementar medidas de seguridad como el cifrado de datos y controles de acceso adecuados.
  • Monitorear actividades sospechosas y realizar copias de seguridad regulares.

5. Amenazas contra la Disponibilidad (Denegación de Servicio – DoS)

Los ataques de denegación de servicio (DoS) tienen como objetivo afectar la disponibilidad de sistemas y datos. Para defenderse contra estos ataques, se pueden seguir estas mejores prácticas:

  • Utilizar firewalls y sistemas de prevención de intrusiones (IPS) para detectar y bloquear el tráfico malicioso.

6. Amenazas contra la Disponibilidad (Amenazas a Internet)

Las amenazas que afectan la disponibilidad de Internet se refieren a interrupciones tanto intencionales como no intencionales en las comunicaciones electrónicas o en la conectividad a Internet, lo cual puede resultar en apagones, censura o interrupciones del servicio. Para salvaguardar la disponibilidad de Internet, es necesario implementar medidas de seguridad en la infraestructura de red, como firewalls, para filtrar y bloquear el tráfico no deseado. Para proteger la disponibilidad de Internet, se deben implementar medidas de seguridad en la infraestructura de red, como firewalls de red, para filtrar y bloquear el tráfico no deseado.

7. Manipulación de la Información

La manipulación de la información se refiere a comportamientos que amenazan o tienen el potencial de impactar negativamente los valores, procesos y políticas políticas. Estas actividades manipulativas son llevadas a cabo de manera intencional y coordinada, tanto por actores estatales como no estatales, dentro y fuera de su territorio. Para prevenir la manipulación de información, es importante seguir estas mejores prácticas:

  • Promover la conciencia sobre la desinformación y las técnicas de manipulación.
  • Fomentar el uso de fuentes confiables.
  • Verificar la información antes de compartirla.

Fuente:

Ad-Hoc Working Group on Cyber Threat Landscapes — ENISA (europa.eu)